Dios Padre
SE ACERCA EL TIEMPO
DE VUESTRA LIBERACIÓN
Título original: Se acerca el tiempo en que aplastaré su cabeza, se acerca el tiempo de vuestra liberación.
Rosario vespertino
Temas:
El tiempo se ha terminado, no tendríais tiempo ya para estudiar, para buscarme,
para comprenderme mejor, pedidle a vuestro Dios Espíritu Santo que os dé esa
infusión espiritual de Conocimiento, para que os enamoréis de Nuestro Amor.
Lo que suceda, será para vuestro bien, aunque en el momento no lo veáis así, de
ese supuesto mal, o de ese aparente mal que vosotros tengáis, surgirá un bien
que luego Me agradeceréis.
Seguid confiando plenamente en Mí, Yo no os voy a dar la espalda en estos
momentos tan difíciles para vosotros, porque sé que sois pequeños y que
necesitáis de alguien mayor que vosotros para entender estas situaciones que
vais a padecer.
Siempre estoy renovando vuestro espíritu, no os estanquéis nunca, Mis pequeños,
ni en estos momentos ni en los venideros, seguid siempre adelante y Yo derramaré
infinidad de Bendiciones sobre vosotros, para que sigáis adelante y sigáis
enamorados de Mi Amor.
Mis pequeños, vosotros sois los cuidadores de infinidad de almas en estos
momentos, no desperdiciéis pues la Gracia que os he concedido de la oración, no
la echéis en saco roto, Mis pequeños, porque vuestra oración va a salvar a
muchísimas almas.
Mensaje de Dios Padre, Nuestro Señor Jesucristo, y la Santísima Virgen María a
J. V. (12 de Diciembre de 2012)
Primer Misterio,
Habla Dios Padre
Sobre: El tiempo se ha terminado, no tendríais tiempo ya para estudiar, para
buscarme, para comprenderme mejor, pedidle a vuestro Dios Espíritu Santo que os
dé esa infusión espiritual de Conocimiento, para que os enamoréis de Nuestro
Amor.
Hijitos Míos, cuando realmente amáis a alguien, no necesitáis incentivos para
seguir adelante con ese amor, el mismo amor os va dando ese deseo grande de
conocer a la persona amada y hacéis todo lo posible, y le procuráis en todo
momento, porque queréis conocer más a esa persona amada.
¿Por qué no Me amáis, como Yo debiera tener vuestro amor? Ciertamente decís que
Me amáis, pero no Me procuráis, os quedáis a medias, no buscáis conocerme mejor
para amarme más y ese ha sido vuestro problema por años o por decir, por siglos,
porque no Me buscáis más, preferís vivir para lo vuestro, para vuestros propios
intereses, para el mundo, para vuestros semejantes y no buscáis crecer
espiritualmente.
Os he dicho que el tiempo ya se terminó y vais a entrar a un tiempo de alta
espiritualidad y por eso os pido Le roguéis a vuestro Dios Espíritu Santo, que
os dé ese deseo grande de quererme conocer más a Mí, vuestro Dios, en Mi
Santísima Trinidad, para que os enamoréis de Mi Amor, para que os enamoréis de
Mi Vida, de la de Mi Hijo, del Amor del Espíritu Santo. Hay tanto, tanto Mis
pequeños, que todavía podéis y debéis conocer acerca de Mi Santísima Trinidad.
Ya os he dicho que en el Cielo solamente se habla de Mi Amor, de la Pasión de Mi
Hijo, de todos los dones del Espíritu Santo. Lo Mío nunca se termina, Mis
pequeños, porque Soy Omnipotente, Soy Eterno, siempre voy creando algo más para
Mi criatura y todos vosotros estáis llamados a ello. Si no estáis preparados, si
no habéis puesto mucho énfasis en vuestra vida por tratar de conocerme mejor,
pedídmelo ya, Mis pequeños, porque ya el tiempo se ha terminado, no tendríais
tiempo ya para estudiar, para buscarme, para comprenderme mejor, pedidle a
vuestro Dios Espíritu Santo que os dé esa infusión espiritual de Conocimiento,
para que os enamoréis de Nuestro Amor.
Mucho Amor debéis conocer todavía, de mucho Amor os debéis llenar todavía y sé
que lo gozaréis, Mis pequeños, porque conozco a la criatura humana. Mi Amor no
tiene fin, Mis pequeños y a cada paso que dais, os engrandecéis, pero además lo
gozáis y Me lo agradecéis. Es todavía una materia que muchos de vosotros no
conocéis, que es nueva y que la gozaréis, como cuando vais a la escuela y que se
os dan materias nuevas. Tomadlo así entonces, Mis pequeños, ésta es la materia
nueva del Nuevo Reino del Amor aquí en la Tierra y que gozaréis del Amor que se
os enseñará y que además empezaréis a vivir y a transmitir a vuestros hermanos.
Os agradezco, Mis pequeños, que estéis Conmigo, los que habéis estado siempre
Conmigo. Por pedirme más, empezasteis a conocerme, pero quiero que tengáis más
conocimiento de Mí, porque quiero que sigáis gozándome, y aunque ya Me gozáis,
todavía hay mucho por delante por conocer y hacer, Mis pequeños.
Os Bendigo con todo Mi Corazón, con el Corazón de Mi Santísima Trinidad para
prepararos para los Nuevos Tiempos del Amor.
Gracias, Mis pequeños.
Segundo Misterio,
Habla Dios Padre
Sobre: Lo que suceda, será para vuestro bien, aunque en el momento no lo
veáis así, de ese supuesto mal, o de ese aparente mal que vosotros tengáis,
surgirá un bien que luego Me agradeceréis.
Hijitos Míos, a lo largo de vuestra vida, todos habéis tenido momentos
difíciles, momentos llevaderos que, ciertamente, han sido problemáticos, que han
marcado vuestra historia y os han dado el carácter que ahora tenéis. Habéis
obtenido de ellos, sabiduría, inteligencia, sabéis ahora cómo manejar muchas
situaciones en vuestra vida y, gracias a todos esos acontecimientos que
vosotros, en lo personal, tuvisteis o habéis tenido a lo largo de vuestra vida,
el acontecimiento que,
dentro de pocos días tendréis,
tomadlo así, Mis pequeños, como un acontecimiento más en donde Yo voy a estar
también Presente, como he estado a lo largo de vuestra vida, junto a vosotros,
ayudándoos a pasar esos tragos amargos o a compartir vuestros momentos bellos.
Dadme vuestra confianza, dadme vuestro amor, que Yo os daré el Mío, porque en todo momento Yo os estoy cuidando. Es Mi Amor el que os está cuidando y ayudando a que podáis sobrellevar estas situaciones en vuestra vida. Será un momento más, quizá, de los momentos amargos que hayáis tenido alguna vez, pero luego, si los estudiáis, de ahí siempre ha surgido un bien, un bien que habéis tomado para después, en vuestra vida, seguir avanzando en capacidades, en dones, pero sobre todo en Sabiduría.
Lo que Yo vaya a permitir en vuestra vida, en lo personal y a nivel mundial o
Universal, será para que sigáis normando vuestra existencia. Será para que
vosotros vayáis madurando todavía más en lo que debéis madurar, que es en el
servicio a vuestros hermanos y, sobre todo, vuestro amor hacia Mí.
No tenéis por qué asustaros, no tenéis por qué dudar en ningún momento de lo que
pueda suceder en vuestra vida. Os vuelvo a repetir, lo que suceda, será para
vuestro bien, aunque en el momento no lo veáis así, de ese supuesto mal, o de
ese aparente mal que vosotros tengáis, surgirá un bien que luego Me
agradeceréis. No dudéis, no temáis, que es Mi Amor el que está junto a vosotros
y es Mi amor el que os guía para que lleguéis a esa santidad que necesito de
cada uno de vosotros.
Gracias, Mis pequeños.
Tercer Misterio,
Habla La Santísima Virgen María
Sobre: Seguid confiando plenamente en Mí, Yo no os voy a dar la espalda en
estos momentos tan difíciles para vosotros, porque sé que sois pequeños y que
necesitáis de alguien mayor que vosotros para entender estas situaciones que
vais a padecer.
Hijitos Míos, Soy vuestra Madre, la Siempre Virgen María. Los tiempos para
quitaros ya ésta esclavitud de Satanás, se acercan. Se acerca el tiempo en que
aplastaré su cabeza, se acerca el tiempo de vuestra liberación, se acerca el
tiempo en que os sentiréis nuevamente hijos de Dios, como fueron consentidos
vuestros Primeros Padres, Adán y Eva. Ciertamente, sois hijos de Dios, pero no
con esa libertad, con esas Potencias con que había dotado a vuestros Primeros
Padres. Iréis recuperando esas Potencias, Mis pequeños y es cuando conoceréis lo
que la palabra “hijos”, “hijos de todo un Dios” serán.
Ésa frase, Mis pequeños, de ser “hijos de Dios”, es maravillosa, no la entendéis
todavía, porque las Potencias quedaron truncas con el Pecado Original.
Yo os estoy tomando, Mis pequeños, os tomo de la Mano, para que vosotros
empecéis a caminar por ese camino bello, santo que quiere Nuestro Padre Dios de
cada uno de vosotros, pero vosotros también tenéis que poner de vuestra parte,
nada se da por obligación.
Vosotros, cuando vais a la escuela, ciertamente estáis obligados a aprender,
porque será para vuestro bien, pero el amor no se obliga, Mis pequeños, el amor
tiene que salir de lo más profundo de vuestro ser. Vosotros amáis aquél que os
hace el bien y, quién mejor que os puede hacer el Bien, que Nuestro Dios y
Señor.
Debéis agradecer en todo
momento, Mis pequeños, que os haya concedido el don de la vida,
porque es una Gracia muy especial que le concede a algunas almas y vosotros
tenéis ése don de la vida que no habéis aprendido a aprovechar bien, como
debierais.
Os alejasteis primeramente de Nuestro Dios y Señor por hacer vuestras cosas y si
meditáis esto, Mis pequeños, avergonzados debierais estar, profundamente, porque
el hecho de que se os diera el don de la vida, era para servir a Nuestro Dios en
Su Santísima Trinidad y cuando atendisteis solamente a vuestras cosas y no
atendisteis al Amor de los Amores, que es Nuestro Dios, vosotros Lo hicisteis a
un lado. Y es una realidad, Mis pequeños, porque si no Le estáis atendiendo, Le
estáis haciendo a un lado y esto, Nuestro Dios no se Lo merece, por eso,
primeramente, debéis estar
arrepentidos de haberle dado la espalda en muchos momentos de vuestra vida.
No hay quien no Le haya
dado la espalda, todos vosotros habéis caído en ese error y eso lo ha provocado
Satanás, a lo largo de vuestra existencia, porque no meditáis continuamente la
vida que os ha dado Nuestro Dios y todo lo que debéis hacer en esa vida y que es
para servirle, como Yo Le he servido, Yo, vuestra Madre, que os conozco y
conozco perfectamente a Mi Hijo, Mi Señor Jesús, a quien sirvo y que es Mi Dios.
Mis pequeños, seguid confiando plenamente en Mí, Yo no os voy a dar la espalda
en estos momentos tan difíciles para vosotros, porque sé que sois pequeños y que
necesitáis de alguien mayor que vosotros para entender estas situaciones que
vais a padecer. Necesitáis
que éstas sean explicadas por una Madre,
por una Madre que sabe qué es lo que va a suceder, pero que lo hará con todo
Amor, con toda delicadeza, y sobre todo, para que vosotros lo podáis entender,
lo apreciéis y lo agradezcáis.
Os bendigo, Mis pequeños, os llevo en Mi Corazón y no os soltéis de Mi Mano, que
Soy vuestra Madre, la Siempre Virgen María.
Gracias, Mis pequeños.
Cuarto Misterio,
Habla Nuestro Señor Jesucristo
Sobre: Siempre estoy renovando vuestro espíritu, no os estanquéis nunca, Mis
pequeños, ni en estos momentos ni en los venideros, seguid siempre adelante y Yo
derramaré infinidad de Bendiciones sobre vosotros, para que sigáis adelante y
sigáis enamorados de Mi Amor.
Hijitos Míos, Soy Jesús, vuestro Hermano. Los Cielos, en lucha eterna están
contra las huestes de Satanás, quien molesto está porque sabe que está llegando
a su fin el tiempo, el tiempo que se le dio para probar a la humanidad entera.
Son momentos de gran coraje y quiere tratar de destruir a todas las almas que
pueda, para que no vean nunca la Luz de Dios, de Nuestro Padre. Todos vosotros
tenéis derecho a regresar al Reino de los Cielos, Yo os traje la Luz a la Tierra
y, además, hice que os percatarais perfectamente de los ataques de Satanás, que
habita entre vosotros, pero que en ese tiempo, era mucho más velado, porque no
tenían una guía, como la que ahora tenéis vosotros, Mis pequeños en estos
tiempos. Vine a desenmascarar a Satanás y lo arrojé de muchos de vuestros
hermanos y quedaron liberados de esa fuerza maligna.
Ciertamente, en estos tiempos, hay muchos hermanos vuestros que también están
bajo el dominio de Satanás y que están haciendo mucho mal en toda la humanidad.
Vosotros mismos lo vivís y lo sentís y hasta sabéis prácticamente quién está
lleno de ese mal, porque sus actos no corresponden a lo que Yo os enseñé, Mis
pequeños.
Mucho mal ha esparcido Satanás por el mundo entero y por el Universo entero, que
aun vosotros no conocéis, pero afectó al Universo entero, afectó a toda Mi
Creación.
Mis pequeños, vosotros, los que estáis Conmigo, los que habéis entendido lo que
es el Amor de todo un Dios y que Lo habéis dejado entrar a vuestro corazón, os
he dejado conocer más sobre esta afectación del pecado en vuestras vidas, en el
mundo y en el Universo, pero que ahora no tenéis esa vida espiritual que Yo
quisiera que tuvierais y que tuvieron vuestros Primeros Padres.
Cuando vosotros decidisteis rechazar el pecado, aunque ciertamente seguís cayendo, pero ya no con tal fuerza, como antiguamente lo hacíais, os vais dando cuenta de lo que es Mi Gracia en el alma del ser humano. Muchos de vosotros, a lo mejor estabais totalmente en el lodo del pecado, quizá, algún hermano vuestro, movido por Mi Gracia, os tendió la mano, crecisteis y empezasteis a gozar de Mi Amor, de Mi Perdón, de Mi Vida y ya no la dejasteis nunca más, os enamorasteis de Mi Amor y ahora estáis a niveles mucho más altos que algunos de Mis consagrados, que se estancaron porque ya no quisieron seguir creciendo en el Amor. Os he dicho que el Amor es dinámico y al momento en que vosotros os detenéis, perdéis y perdéis muchísimo porque, como Mi Amor es Eterno, es Omnipotente, es Absoluto, no lo podéis detener y, así, recibiréis tanto como vosotros queráis recibir, ayudados con el mismo dinamismo con el que lo buscasteis en un principio, cuando os levantasteis del mal en el que estabais.
Ninguno de vosotros puede decir que, por estar Conmigo, haya recibido un mal o
que haya ido en decadencia o que su vida sea un desastre, es todo lo contrario,
Mis pequeños, cuando vosotros os acercáis a Mí, todo empieza a mejorar en
vuestra vida, todo os cambia, todo se rejuvenece, todo vive, porque el Amor da
vida a todo. Por eso, os
digo que estáis a un paso de la gran vida que se empezará a dar ya en cada uno
de vosotros, empezaréis a vislumbrar lo que tendréis en un futuro, si es que os
mantenéis Conmigo.
Pedidme que nunca os acostumbréis a Mi Amor, porque muchos hermanos vuestros se
acostumbran a estar Conmigo y ese acostumbramiento les lleva a padecer como una
somnolencia espiritual, y ya no avanzan, se quedan estancados.
Estad siempre
despiertos ante Mi Amor, ante todo lo que se da a vuestro alrededor.
Cada día, Mis pequeños, es un día nuevo que Yo Creo para cada uno de vosotros,
es un día en el cual aprenderéis muchas cosas nuevas, porque así Soy Yo, vuestro
Dios, siempre estoy renovando vuestro espíritu, no os estanquéis nunca, Mis
pequeños, ni en estos momentos ni en los venideros, seguid siempre adelante y Yo
derramaré infinidad de Bendiciones sobre vosotros, para que sigáis adelante y
sigáis enamorados de Mi Amor.
Gracias, Mis pequeños.
Quinto Misterio, Habla Nuestro Señor Jesucristo.
Sobre: Mis pequeños, vosotros sois los cuidadores de infinidad de almas en estos
momentos, no desperdiciéis pues la Gracia que os he concedido de la oración, no
la echéis en saco roto, Mis pequeños, porque vuestra oración va a salvar a
muchísimas almas.
Hijitos Míos, cuando vosotros oráis, vuestra oración siempre va a ser poderosa,
porque vuestra oración la vais a hacer conjuntamente Conmigo, vuestro Dios y
Señor. Yo os vine a enseñar cómo orar, y tenéis también a Mi Madre, vuestra
Madre, la Siempre Virgen María, que os acompaña siempre en la oración, junto con
todos los ángeles y santos del Cielo.
Mis pequeños, haced que vuestra oración, sea de corazón. En estos momentos
difíciles, en los que vivís, vuestra oración tiene que ser continua, no os
detengáis en ningún momento. La oración va a hacer que Mi Amor se derrame sobre
todas las almas. Esto es un dinamismo perfecto, Mis pequeños.
Con la oración, vosotros Me llamáis, vosotros Me pedís, vosotros agradecéis,
mueve Mi Corazón a que derrame Mis bendiciones sobre vosotros y sobre vuestros
hermanos. Muchos, muchos
de vuestros hermanos necesitan y necesitarán de vuestra oración,
para esos momentos
en los
cuales no sabrán ellos mismos qué hacer, cómo entender lo que va a suceder, qué
hacer en esos momentos, que pueden ser hasta de desesperación para muchos de
ellos, que hasta se puedan quitar la vida o cometer errores gravísimos.
Mis pequeños, vosotros sois los cuidadores de infinidad de almas en estos
momentos, no desperdiciéis pues la Gracia que os he concedido de la oración, no
la echéis en saco roto, Mis pequeños, porque vuestra oración va a salvar a
muchísimas almas. No os imagináis, Mis pequeños, lo que pueden pensar estas
almas que no están cerca de Mí, son almas que no están preparadas para soportar
estos momentos.
Yo os había dicho, ya hace varios años, que pidierais la transfiguración de cuerpo y alma para vosotros, para que se fuera dando paulatinamente y esto era para que os fuerais llenando de la Luz del Espíritu Santo en vosotros mismos, para que no fuera tan fuerte el cambio, pero estas almas de vuestros hermanos, que no Me conocen, que no Me buscaron, que no buscaron tener la perfección en el amor, para ellos va a ser más fuerte este cambio y pueden no entenderlo y hasta les puede causar un daño, porque no quisieron prepararse, porque hay muchas almas que aun estando frente a la Gracia, a Mi Gracia, no la comprenden, como sucedió cuando Yo Mismo caminé entre a los hombres, que aún estando frente a ellos, Me negaron y hasta pidieron Mi Muerte. Esto puede suceder también en estos momentos, que Me tendrán, tendrán Mi Gracia frente a ellos pero no la entenderán, la negarán y pedirán nuevamente que Me aparte de ellos.
Vosotros debéis entender esto y
ayudarme a la salvación de estas almas que
necias están de todo lo que Yo les quiero dar, que se quieren mantener en su
necedad, en su olvido en atacar Mis Leyes, en atacar Mi Amor. Ayudadles, Mis
pequeños, para que no se pierdan.
Gracias, Mis pequeños.
Página Principal
(Índice del tema)
Páginas principales
Índice General y páginas misceláneas
Meditemos con Jesús (importante)
Reflexiones y mensajes de María
Mensajes: El Libro de la Verdad
Videos de música religiosa (popular)
Rosarios, Coronas y Coronillas
Esta página pertenece al sitio "Oraciones y Devociones Católicas"
Visite siempre la Portada del sitio, siempre hay algo interesante ahí.