SOY LA CORREDENTORA DEL VERBO ENCARNADO, ACERCO A TI SU SANGRE PARA QUE LA CONVIERTAS EN TU ESCUDO, Y TE PRESENTO SU CUERPO PARA QUE TE DÉ ASILO Y TAMBIÉN TE GUARDE; ASÍ LIBRARÁS TUS DURAS BATALLAS; ESAS QUE CONVERTIRÁS EN VICTORIA CUANDO DECIDAS ACEPTAR MI MANO Y MI COMPAÑÍA.

Mensaje de la Madre de Jesús a María Rocío

29/04/19 (Asunción-Paraguay)

Hijitos de mi Inmaculado Corazón solo una vez que lleguéis a la eternidad reconoceréis lo que habéis hecho con vuestro tiempo de vida en la carne, los años, los días y las horas y lo que podríais haber hecho; allí también os daréis cuenta de las oportunidades que habéis dejado pasar en la vida para hacer el bien, una vez en la eternidad será demasiado tarde; el momento es hoy, es ahora para que empecéis a caminar por senderos que os conducirán a la santidad.

Que no harían mis hijos para empezar una nueva vida si supierais lo que es la eternidad. Debéis saber que lo duradero no es eterno; pero lo eterno es duradero. Os insto pequeños míos a que no dejéis pasar las horas porque el tiempo en la carne es pasajero; vosotros construís hogares sólidos en la tierra pero solo vivís en ellos como huéspedes, os aliento hoy a construir con ladrillos de amor, para aquel hogar donde habitaréis eternamente.

Dios Padre os da el tiempo necesario para mejorar la condición de vuestras almas; el hombre pasa por la vida una sola vez, más no habrá una segunda oportunidad como muchos enseñan hoy; esto es falso hijitos míos. Dios Padre os da una sola oportunidad para vivir en la tierra y es el tiempo que debéis ocupar para gestar vuestras almas en santidad y preparar durante vuestra vida temporal frutos de amor a ser presentados en vuestro juicio particular al ingresar al eterno presente; más son las artimañas de mi adversario para haceros creer que estuvisteis antes en tal o cual lugar o que uno vuelve a la tierra en otro cuerpo; todo eso hijitos míos es un engaño más del mal. Cada uno de vosotros fue creado a imagen y semejanza de Dios y sois únicos e irrepetibles ante sus ojos.

El tiempo hijitos míos es costoso y corto, no se puede volver atrás; el cumplimiento de la voluntad de Dios debe ser la palabra clave de toda vuestra vida; no os sumerjáis pequeños míos en cosas limitadas por el tiempo, os llamo a que toméis conciencia del significado de la palabra ETERNIDAD, y por sobre todo a que ordenéis la vida que estáis llevando sujetando cada uno de vuestros actos a los preceptos de Dios. No os agobiéis si caéis una y otra vez; lo importante es volver a levantarse y comenzar de nuevo; errar es humano, más levantarse de nuevo es una bienaventuranza; quedarse en el pecado voluntariamente significa el rechazo del amor de Dios.

Atesorad en vuestros corazones las virtudes del Santo Espíritu de Dios, no juzguéis a los demás, los que más juzgan a sus hermanos; son quienes más deben trabajar para mejorar ellos mismos. Una palabra de aliento puede curar; mas una palabra hiriente tiene el poder de causar una gran llaga espiritual a vuestros hermanos. Por ello no dejéis que pasen los días sin una buena palabra o una buena obra; y si veis que vuestros hermanos se encuentran en un mal obrar; sembrad la paz donde hay conflictos, doblad rodilla por ellos; unos deberían cargar con el peso del otro, desarrollando las virtudes de amor al prójimo y la caridad. La caridad hijitos míos cubre multitud de pecados.

Haced el bien hijitos míos mientras tengáis tiempo; porque llegará el momento en que sólo cosecharéis lo que habéis sembrado.

Tened presente que un buen cristiano ha de tener la decisión firme de cumplir la voluntad de Dios, es amable y gentil con su prójimo; siempre se dirige a Dios con humildad y sencillez; se acostumbra a orar por los desaciertos ajenos y por los propios.

Cada hombre debe examinar su interior para pasar de la mediocridad espiritual a la santidad. Muchos hijos míos desean ser buenos cristianos pero luchar por la santidad les parece demasiado y la iglesia de mi Padre necesita de santos verdaderos y no de personas un poco santas. Es muy importante ser leal en las cosas pequeñas porque fortalecen la humildad y conducen a los grandes actos; en las cosas pequeñas es donde verdaderamente se ve lo grande, el cumplimiento estricto de los pequeños deberes no requiere de menor esfuerzo que los actos heroicos; las cosas pequeñas añaden mucho más a la suma total del bien del hombre que las grandes acciones, aquel que es fiel en lo pequeño; también será fiel en lo grande.

Tened presente que mi hijo se entregó en la cruz por cada uno de vosotros para que os podáis levantar de vuestras caídas reiteradamente. Cada uno de vosotros tiene un valor incalculable ante los ojos de Dios, pues imaginad que habéis sido redimidos a precio de sangre para que tengáis vida en abundancia, más solo depende de vuestra voluntad convertir vuestros cuerpos en dignos templos del Santo Espíritu de Dios para que empecéis a cosechar frutos de amor que durarán por toda una eternidad.

Unid vuestras almas a los sacramentos, en cada celebración eucarística acerco a ti su sangre para que la conviertas en tu escudo y te presento su cuerpo para que te de asilo. En tus momentos de aflicción empuña con fe el rezo del santo rosario y yo, tu madre elevare tus plegarias a los pies del todopoderoso y las presentare como un regalo de amor de tu parte al que todo lo puede, será mi inmaculado corazón tu refugio de amor.

Os amo; os doy mi paz; Mamá María.

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